Desde luego la justicia y los políticos no dejan de sorprenderme. En ocasiones tengo la sensación de que necesitan “distraer” su tiempo en propuestas de Ley de esas que no son importantes pero sí muy mediáticas.
En Florida el Senado ha aprobado un proyecto de Ley, por unanimidad no te lo pierdas, para conseguir que las mascotas puedan ser enterradas junto a sus dueños.
Sí, ya sé que hablamos de los amigos más fieles. Esos que nada piden y todo dan, y no hablo sólo de los canes, así que qué mejor idea que llevárnoslos con nosotros a la tumba.
Tampoco sé si este proyecto verá la luz, quien sabe, pero lo cierto es que da la impresión de que el Senado de Florida no debe andar muy saturado de curro si se dedica a pensar en cosas como ésta.
Yo, que he de reconocer siempre pienso en lo más retorcido, creo que el rollo aquí está en las funerarias. Ahora que el negocio empieza a flojear, que cada vez es más la gente que quiere que la incineren y lancen sus cenizas al mar (yo sigo creyendo que la culpa de esto la tiene Serrat por lo menos en la zona mediterránea), pues han de buscar nuevas “vías de negocio”.
Qué mejor, debieron pensar, que fichar como clientes a las mascotas de nuestra cartera de clientes humanos. Así en lugar de una incineración cobramos dos (porque la ética dice que no se pueden incinerar juntos) y encima también multiplicamos por dos los gastos de sepultura y funeral. Y segurisimo que alguien más por el camino hace de esto un “bisness” total.
Así que ya sabes. Olvídate de la escena tan romántica de enterrar a tu mascota en el jardín y plantar un árbol o, si no tienes jardín, buscar un monte cercano mientras entonas el only you a lágrima viva. Deberás pasar por caja, y darle un adiós como Dios manda.
Guau, nunca mejor dicho, guau.
Merx
En Florida el Senado ha aprobado un proyecto de Ley, por unanimidad no te lo pierdas, para conseguir que las mascotas puedan ser enterradas junto a sus dueños.
Sí, ya sé que hablamos de los amigos más fieles. Esos que nada piden y todo dan, y no hablo sólo de los canes, así que qué mejor idea que llevárnoslos con nosotros a la tumba.
Tampoco sé si este proyecto verá la luz, quien sabe, pero lo cierto es que da la impresión de que el Senado de Florida no debe andar muy saturado de curro si se dedica a pensar en cosas como ésta.
Yo, que he de reconocer siempre pienso en lo más retorcido, creo que el rollo aquí está en las funerarias. Ahora que el negocio empieza a flojear, que cada vez es más la gente que quiere que la incineren y lancen sus cenizas al mar (yo sigo creyendo que la culpa de esto la tiene Serrat por lo menos en la zona mediterránea), pues han de buscar nuevas “vías de negocio”.
Qué mejor, debieron pensar, que fichar como clientes a las mascotas de nuestra cartera de clientes humanos. Así en lugar de una incineración cobramos dos (porque la ética dice que no se pueden incinerar juntos) y encima también multiplicamos por dos los gastos de sepultura y funeral. Y segurisimo que alguien más por el camino hace de esto un “bisness” total.
Así que ya sabes. Olvídate de la escena tan romántica de enterrar a tu mascota en el jardín y plantar un árbol o, si no tienes jardín, buscar un monte cercano mientras entonas el only you a lágrima viva. Deberás pasar por caja, y darle un adiós como Dios manda.
Guau, nunca mejor dicho, guau.
Merx
0 comentarios:
Publicar un comentario