Lo siento. De entrada te pido disculpas por meterme de nuevo en el escabroso terreno de la política de nuestro país, pero te doy mi palabra de que aunque he intentado resistirme no lo he conseguido.
Ahora resulta que el Sr. Rajoy, el “señoriño” que dirían por estos lares, está ofendido. Según sus palabras, se siente agredido por las palabras de Jesús de Polanco contra su partido, palabras , según él, han ofendido a todos y cada uno de los militantes del PP.
El presidente de Prisa, según afirmaciones de Rajoy, calificó al PP como “fuera del sistema” y “provocador de una futura guerra civil”. Ante estas afirmaciones el líder del PP reclama su derecho a actuar en “legítima defensa” ya que, recalcó, el siempre defenderá la libertad de información.
Seriedad, por favor. No defienden la libertad de información, si ésta se entiende como aquella que nos explicaron a todos en la facultad de periodismo, y parece mentira que pueda llegar a hacer estas afirmaciones el líder de un partido que manipuló la información a ojos de todos los ciudadanos de este país por lo menos en dos ocasiones que sepamos: Irak y 11-M.
No digo yo que Polanco, por la figura que representa en el mundo de la información, no debiera medir sus palabras. Quizás no debería haber generalizado tanto al hablar de Partido, quizás debería haber sido más duro con los líderes del partido, quizás sencillamente se hizo portavoz del pensar de muchos informadores de este país. Quizás.
La “legítima defensa” del Sr. Rajoy ha sido la de tomar la decisión de rechazar cualquier entrevista que provenga del Grupo Prisa. Ahí queda eso.
La verdad es que cada vez es más difícil disfrutar en este país del “derecho a la información”. Ahora todo depende de qué fuente utilices para estar informado, de qué cadena de televisión, emisora de radio o prensa escrita escojas. Todas y cada una de ellas te darán una versión distorsionada de la realidad. Su versión.
Por eso, y como dice una buena amiga mía, yo voy a volver a estudiarme cómo se hace una media ponderada. Para salir del túnel de la confusión.
Merx
Ahora resulta que el Sr. Rajoy, el “señoriño” que dirían por estos lares, está ofendido. Según sus palabras, se siente agredido por las palabras de Jesús de Polanco contra su partido, palabras , según él, han ofendido a todos y cada uno de los militantes del PP.
El presidente de Prisa, según afirmaciones de Rajoy, calificó al PP como “fuera del sistema” y “provocador de una futura guerra civil”. Ante estas afirmaciones el líder del PP reclama su derecho a actuar en “legítima defensa” ya que, recalcó, el siempre defenderá la libertad de información.
Seriedad, por favor. No defienden la libertad de información, si ésta se entiende como aquella que nos explicaron a todos en la facultad de periodismo, y parece mentira que pueda llegar a hacer estas afirmaciones el líder de un partido que manipuló la información a ojos de todos los ciudadanos de este país por lo menos en dos ocasiones que sepamos: Irak y 11-M.
No digo yo que Polanco, por la figura que representa en el mundo de la información, no debiera medir sus palabras. Quizás no debería haber generalizado tanto al hablar de Partido, quizás debería haber sido más duro con los líderes del partido, quizás sencillamente se hizo portavoz del pensar de muchos informadores de este país. Quizás.
La “legítima defensa” del Sr. Rajoy ha sido la de tomar la decisión de rechazar cualquier entrevista que provenga del Grupo Prisa. Ahí queda eso.
La verdad es que cada vez es más difícil disfrutar en este país del “derecho a la información”. Ahora todo depende de qué fuente utilices para estar informado, de qué cadena de televisión, emisora de radio o prensa escrita escojas. Todas y cada una de ellas te darán una versión distorsionada de la realidad. Su versión.
Por eso, y como dice una buena amiga mía, yo voy a volver a estudiarme cómo se hace una media ponderada. Para salir del túnel de la confusión.
Merx
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