Pequeños pasos Publicado por Mujeres

Otro paso, pequeño pero otro. Hoy la secretaria general de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, y la Delegada del Gobierno contra la Violencia sobre la Mujer, presentaban oficialmente el nuevo teléfono de emergencias contra la violencia de género.

El nuevo número, 016, funciona desde el mes pasado pero han esperado a tener un volumen más o menos significativo de llamadas para presentarlo en sociedad, un volumen que en sólo un mes asciende a 445 (ahí es nada). Además, han aprovechado la ocasión para dar a conocer la campaña publicitaria de este nuevo servicio que se distingue por no aparecer en las facturas ni tampoco en la memoria de llamadas realizadas.

Este servicio estará disponible las 24 horas del día y prestará asesoramiento no sólo a las víctimas potenciales sino también a sus familias y amigos, es decir a su entorno.

Hoy, cuando leía sobre la presentación de este 016 veía a la vez la última agresión publicada (que seguro y lamentablemente no debe ser la misma): una mujer que fue retenida y maltratada durante un mes por un “amigo”. Y claro lo primero que te viene a la cabeza es ¿y su familia?, ¿y sus vecinos? , ¿y sus verdaderos amigos?, pues nadie de todos ellos se enteró. Nadie.

016, un paso más. No sé si realmente esta nueva medida conseguirá reducir el número de víctimas que sufren agresiones o incluso la muerte a mano de personas que decían que las querían. Sí es cierto que el anonimato de la llamada, que no deje huella, puede ayudar a esquivar el férreo control al que son sometidas por sus parejas pero ¿será suficiente?.

Mi humilde opinión es que lo más difícil es actuar y seguimos sin saber cómo ayudar a hacerlo. Está bien recibir asesoramiento, o simplemente oir una voz amable que escucha su historia pero después esa persona deberá armarse de valor, dirigirse a una comisaría y poner una denuncia. Después vendrá la presión del agresor, el “no volverá a ocurrir” y ese largo etcétera de pasos que sí son de gigante.

No sé querida, aplaudo las iniciativas que faciliten las cosas a todos aquellos que sufren agresiones o maltrato de cualquier tipo. Pero quizás todos deberíamos implicarnos un poco más y no mirar siempre para otro lado. A lo mejor de esta manera, si realmente volviéramos a la época en la que se miraba a los ojos de la gente podríamos ser capaces de recibir esa llamada de auxilio.

Como decía el hijo de una víctima de violencia de género “ si la cifra de muertes del año anterior, superior a las 50 mujeres, hubiera sido a causa del terrorismo toda España se hubiera tirado a la calle. En nuestro caso todo el mundo lo lamenta, pero nada más”.

Dura reflexión ¿no crees?

Merx