Lumbreras Publicado por Mujeres

Duerme la siesta y vivirás más. Este es el asombroso descubrimiento que ha hecho un grupo de prestigiosos científicos griegos tras más de 6 años de intensas investigaciones. Parece que la cabezadita después de comer reduce la mortalidad especialmente, y aquí viene lo fascinante del estudio, en hombres que trabajan. En mujeres, han decidido que por 6 muertes que se produjeron no vale la pena extrapolar los resultados. ¿?

La verdad es que no alcanzo a comprender qué han estado haciendo los científicos estos durante los 6 años que les ha durado el trabajo, ni siquiera entiendo por qué se decidieron a investigar esto, tampoco comprendo a la gente que se deja mirar mientras se entrega al sueñecito después de comer, a menos que sea porque les han pagado la comida, y lo que ya no cabe en mi cabeza es que haya alguien que pague para que otros estudien sobre esto.

Luego, sigues dándole vueltas a las conclusiones del estudio y empiezas a encenderte. Resulta que si eres hombre y activo laboralmente, la siesta es especialmente beneficiosa porque su efecto actúa contra el estrés. Y tú te preguntarás: ¿ todos los hombres activos laboralmente sufren stress? ¿y si eres laboralmente inactivo? ¿y si no eres hombre?, ¿y si eres MUJER?. Pués dice el estudio que los resultados sólo son válidos en hombres. El hecho de que sólo se produjeran seis muertes entre las mujeres trabajadoras evaluadas, hizo imposible un análisis adecuado de los datos. Han estudiado a un total de 24.000 hombres y ni rastro del número de casos estudiados en mujeres.

Lo que más quema de estos estudios es que luego, siempre hay un lumbreras, hombre por supuesto, que se queda con la esencia del descubrimiento y en un alarde de innovación, lo propone a un comité de dirección, de hombres por supuesto, que acaba poniendo en marcha una prueba piloto en la que los hombres de 35 a 65 años, o sea todos, descansarán durante 30 minutos entre las 15.30 y las 16.00h. Si no la palma ninguno en los 3 próximos años, la iniciativa se hará extensiva también a las mujeres.

En el fondo, como nosotras duramos más, siempre hay un lumbreras resentido que intenta demostrar su superioridad con gilipolleces en vez de ponerse a trabajar.