No tengo ni idea de qué me deparará el año, y menos mal porque si no sería un latazo. Después de fin de año, tremendo la verdad, y de un día de año nuevo en el que intenté recuperar mis horas de sueño a toda velocidad, hoy estoy para el arrastre.
Esto del trasnoche cada vez pasa una factura más alta. Supongo que, como todo, sube, como mis años también, así que aunque esta mañana he hecho más uso que nunca de las bondades de la cosmética, he de decirte que sigo pareciendo una osa panda con las ojeras que llevo.
Pero como, para variar, siempre lo dejo todo para el último momento, hoy me ha tocado sesión de compras. Todos los regalos de reyes que, por supuesto, no había comprado y ni tan siquiera imaginado.
Así que te puedes imaginar mi estado en este momento. Lamentable. Los centros comerciales, tiendas de barrio y ese largo etcétera de comercios que nos invitan al consumo estaban a reventar. Encima después de meses esperando esa lluvia que tanto necesitábamos, ha decidido hacer su aparición precisamente hoy. Concretamente cuando yo volvía cargada de bolsas y paquetes que tendré que envolver otra vez porque no quieras saber cómo han quedado los lacitos
En fin. Que a pesar de mi día tan patético, porque encima me he quedado sin un euro, a mi me molan los reyes magos. Sí chica, soy así de tradicional. Me gusta todo el rollo que se monta de la cabalgata, en la que se trata de esquivar los caramelazos que te lanzan desde las carrozas en plan casi asesino, eso de no saber qué te van a regalar…Todo, todo, todo.
Y es que además en mi casa mantenemos la tradición también entre los adultos. No nos hacemos peticiones, si no que esperamos que el otro se lo curre y averigüe cómo sorprenderte. A pesar de que ya sabemos que, snif, “los reyes son los padres”, nos encanta jugar a las intrigas unos con otros para no perder la ilusión.
Pero sobre todo me encantan los reyes porque si no ya no habría más vacaciones de navidad. El otro día me sorprendía pensando en eso, y es que si finalmente Papa Noel consiguiera “borrar” la tradición de los reyes….el día 2 todos a su vida normal.
Ya ves querida, un motivo más para defender que siga existiendo el día de Reyes. Y sí, con roscón incluido que está de vicio.
Merx
Por cierto. El más molón Baltasar. Sin lugar a dudas..
Esto del trasnoche cada vez pasa una factura más alta. Supongo que, como todo, sube, como mis años también, así que aunque esta mañana he hecho más uso que nunca de las bondades de la cosmética, he de decirte que sigo pareciendo una osa panda con las ojeras que llevo.
Pero como, para variar, siempre lo dejo todo para el último momento, hoy me ha tocado sesión de compras. Todos los regalos de reyes que, por supuesto, no había comprado y ni tan siquiera imaginado.
Así que te puedes imaginar mi estado en este momento. Lamentable. Los centros comerciales, tiendas de barrio y ese largo etcétera de comercios que nos invitan al consumo estaban a reventar. Encima después de meses esperando esa lluvia que tanto necesitábamos, ha decidido hacer su aparición precisamente hoy. Concretamente cuando yo volvía cargada de bolsas y paquetes que tendré que envolver otra vez porque no quieras saber cómo han quedado los lacitos
En fin. Que a pesar de mi día tan patético, porque encima me he quedado sin un euro, a mi me molan los reyes magos. Sí chica, soy así de tradicional. Me gusta todo el rollo que se monta de la cabalgata, en la que se trata de esquivar los caramelazos que te lanzan desde las carrozas en plan casi asesino, eso de no saber qué te van a regalar…Todo, todo, todo.
Y es que además en mi casa mantenemos la tradición también entre los adultos. No nos hacemos peticiones, si no que esperamos que el otro se lo curre y averigüe cómo sorprenderte. A pesar de que ya sabemos que, snif, “los reyes son los padres”, nos encanta jugar a las intrigas unos con otros para no perder la ilusión.
Pero sobre todo me encantan los reyes porque si no ya no habría más vacaciones de navidad. El otro día me sorprendía pensando en eso, y es que si finalmente Papa Noel consiguiera “borrar” la tradición de los reyes….el día 2 todos a su vida normal.
Ya ves querida, un motivo más para defender que siga existiendo el día de Reyes. Y sí, con roscón incluido que está de vicio.
Merx
Por cierto. El más molón Baltasar. Sin lugar a dudas..
3 comentarios:
Ahora los reyes son los abuelos.
¿Ha sido usted buena¿ Pues, muy mal.
Mmmmm...no responderé a esa pregunta antes de mañana. Por si..
Me gusta más el misterio de los reyes al pazguato de Santa Claus. Me friega que un tipo se arriesgue a morir de un golpe de calor solo por ponerse el oneroso traje rojo y decir, en medio de un mar de sudor, JO JO JO, para beneplácito de los niños ingenuos. Los reyes, aparte, sombolizan los regalos traidos para el niño Jesús. Saludos.
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