Estamos en etapas de desafío. Desafío a tu economía tras las compras navideñas, rebajas en plena euforia y amenaza del “everest” de los próximos meses.
Desafío a la báscula que se ríe de ti cuando, oh dios mio, descubres que el turrón y el roscón de reyes se han instalado cual ocupas en tus caderas.
Desafíos deportivos, con un Meca empeñado en batir un record que nadie entiende muy bien a santo de qué, en un Barça que no pasa por sus mejores momentos, en un Dakar suspendido por amenazas terroristas y un largo etcétera que me aburre hasta enumerar.
Después encontramos desafíos no tan banales, como los equilibrios para llegar a tener una vivienda, los problemas de transporte, huelgas, reivindicaciones, y más y más..
De todos los desafíos me quedo, por un momento, con el de la Iglesia a la sociedad. Desde la convocatoria religioso-política en defensa de la familia que, en fechas tan señaladas como la Navidad, se celebró en pleno centro de Madrid hasta las noticias diarias que en plan gota malaya van apareciendo cada día en la prensa.
Ahora resulta que, como Rouco y el Papa son colegas de la uni, pues el primero le ha pedido al segundo que le eche un cable porque los españolitos nos hemos olvidado de quién manda en este país. Así, haciendo uso de la tecnología el Papa dirigió unas palabras a los reunidos en la convocatoria de Madrid para hacer un llamamiento al pasado, perdón, a las buenas costumbres.
Me alucina hasta dónde pueden llegar los desafíos. Es evidente el peso socioeconómico que siempre ha tenido, y tendrá, la Iglesia en nuestro país. Sólo hay que echar un repaso a los libros de historia para ser conscientes, tanto en etapa en democracia como en dictadura. Pero chica, a estas alturas y con la que está cayendo, no deja de sorprenderme.
Estos días he intentado permanecer impasible ante tanto despropósito eclesiástico, incluso ante las absurdas declaraciones del obispo que decía que los abusos a menores era porque “algunos provocan” Así he logrado evitar un tema que me pone de mal humor, de muy mal humor.
La defensa de la familia “tradicional” como ellos dicen, cuando precisamente ellos han renunciado a tener “familia tradicional”; el divorcio que es casi el anticristo, pero que si te gastas una pasta y pides la nulidad eclesiástica todo está perdonado. El aborto, los preservativos, los gays, las lesbianas..y la educación.
Ya te he contado de la polémica con la asignatura de “Educación para la Ciudadanía” que, la verdad, a mi no me parece para tanto. Pero hoy leo asombrada, nuevo desafío, que siete comunidades autónomas han decido aumentar las horas de religión en ESO. Pais Vasco, Navarra, Baleares, La Rioja, Madrid, Murcia y Valencia han decidido utilizar el margen de horas que les concede la ley, para aumentar las asignaturas que deseen, con la de Religión.
Cómo iban a aumentar la de matemáticas, castellano o incluso inglés, a pesar de las últimas estadísticas sobre nuestros alumnos, a la cola de Europa. No, por Dios, eso nos hubiera llevado derechitos al infierno.
En fin. Que todo es lo mismo. Y, cómo no, esas autonomías están gobernadas por el PP o lo estaban en el momento en que se tomó esa decisión. Así que volvemos a las "acciones" de la iglesia con color político.
Merx
Después encontramos desafíos no tan banales, como los equilibrios para llegar a tener una vivienda, los problemas de transporte, huelgas, reivindicaciones, y más y más..
De todos los desafíos me quedo, por un momento, con el de la Iglesia a la sociedad. Desde la convocatoria religioso-política en defensa de la familia que, en fechas tan señaladas como la Navidad, se celebró en pleno centro de Madrid hasta las noticias diarias que en plan gota malaya van apareciendo cada día en la prensa.
Ahora resulta que, como Rouco y el Papa son colegas de la uni, pues el primero le ha pedido al segundo que le eche un cable porque los españolitos nos hemos olvidado de quién manda en este país. Así, haciendo uso de la tecnología el Papa dirigió unas palabras a los reunidos en la convocatoria de Madrid para hacer un llamamiento al pasado, perdón, a las buenas costumbres.
Me alucina hasta dónde pueden llegar los desafíos. Es evidente el peso socioeconómico que siempre ha tenido, y tendrá, la Iglesia en nuestro país. Sólo hay que echar un repaso a los libros de historia para ser conscientes, tanto en etapa en democracia como en dictadura. Pero chica, a estas alturas y con la que está cayendo, no deja de sorprenderme.
Estos días he intentado permanecer impasible ante tanto despropósito eclesiástico, incluso ante las absurdas declaraciones del obispo que decía que los abusos a menores era porque “algunos provocan” Así he logrado evitar un tema que me pone de mal humor, de muy mal humor.
La defensa de la familia “tradicional” como ellos dicen, cuando precisamente ellos han renunciado a tener “familia tradicional”; el divorcio que es casi el anticristo, pero que si te gastas una pasta y pides la nulidad eclesiástica todo está perdonado. El aborto, los preservativos, los gays, las lesbianas..y la educación.
Ya te he contado de la polémica con la asignatura de “Educación para la Ciudadanía” que, la verdad, a mi no me parece para tanto. Pero hoy leo asombrada, nuevo desafío, que siete comunidades autónomas han decido aumentar las horas de religión en ESO. Pais Vasco, Navarra, Baleares, La Rioja, Madrid, Murcia y Valencia han decidido utilizar el margen de horas que les concede la ley, para aumentar las asignaturas que deseen, con la de Religión.
Cómo iban a aumentar la de matemáticas, castellano o incluso inglés, a pesar de las últimas estadísticas sobre nuestros alumnos, a la cola de Europa. No, por Dios, eso nos hubiera llevado derechitos al infierno.
En fin. Que todo es lo mismo. Y, cómo no, esas autonomías están gobernadas por el PP o lo estaban en el momento en que se tomó esa decisión. Así que volvemos a las "acciones" de la iglesia con color político.
Merx
4 comentarios:
Si es que debe costar mucho renunciar a que los demás hagan lo que tú dices ...
Estoy con Lucía. Que no entiendo yo a qué viene esa afición a considerar la familia como un club privado al que solo pueden acceder aquéllos que ellos consideren aptos...
la religiosidad es una excusa para mantener árida la mente de cuestionamientos y así mantener cautivos a los ciudadanos bajo los intereses del poder...
Es el opio del pueblo.... Y dejar de ser los "amos y señores" tiene que ser duro
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