jueves, 27 de septiembre de 2007

Entre col y col, lechuga

Hay que ver cómo están los políticos. Debe ser la proximidad de las elecciones la causante de tanta alteración, tanto enloquecimiento y de que las lenguas estén tan sueltas. A mi nunca me ha atraído demasiado la política, pero debo reconocer que este tono de culebrón y de estilo gran hermano que los políticos le están dando al tema, es apasionante y me pone mucho. Me pone tanto, que estoy deseosa de que llegue el día siguiente para ver qué le contesta menganito a fulanito en respuesta a las acusaciones del día.

Pero parece ser que la afición que está despertando este apasionante culebrón político que estamos viviendo se está generalizando y no me afecta exclusivamente a mí, cosa que por otro lado me tranquiliza. Entre tanta foto borbónica quemada, el ahora te quito y ahora te pongo de las banderas españolas, la campaña de acoso y derribo contra el rey, el asesor de imagen de Rajoy sudando tinta para ver cómo favorece al candidato, el discursazo en inglés de Zapatero con Bush, la mosca cojonera de Aznar revoloteando siempre en el lugar más inoportuno, los planes varios del gobierno para ver cómo nos compra en las próximas elecciones y las explicaciones de ministros varios cada cinco minutos intentando justificar tanta alteración de neuronas…… esto es un sin vivir.

Pero lo que no han perdido es la capacidad de sorprendernos cada día con un nuevo guiño en el guión que no esperábamos. Si ayer el ex-presidente de la Generalitat de Cataluña, Pasqual Maragall, desvelaba el pacto al que llego con ZP para que el Estatut avanzara, hoy el Bloque Naconalista Galego (BNG) propone que se elimine la disposición que regula el juramento o promesa ante la bandera de España por entender que hay que "suprimir fórmulas arcaicas de ensalzamiento de valores que deberían ser superados en la actualidad, algunos pueblos de Andalucía reclaman la tercera repúblic, y Carod Rovira presenta en el Senado una enmienda parcial al proyecto de Ley de la Carrera Militar para que el presidente del Gobierno sustituya al Rey como jefe supremo de las Fuerzas Armadas. Pues mira, es justo lo que le faltaba a Zapatero, vestirse de militar y desfilar!!!.

Y así entre col y col transcurren los días, hasta que de repente: toma lechuga!!!. Un elemento nuevo se filtra en el culebrón para añadirle sabor al tema. El portavoz de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino, ha dicho que el Estado debe promover la natalidad en el "contexto adecuado", como es que los niños tengan padre y madre conocidos, sin que esto quiera decir que no pueda ayudarse a los hijos de madre soltera. ¿Perdón? ¿Ha dicho conocidos? Esta sí que es buena.


Estaremos atentos. A ver quién es el primero en reaccionar a las declaraciones de la Conferencia Episcopal.

Yo te digo, que si de lo que se trata es de mantener al pueblo despierto, estamos a un paso de que el próximo portavoz del Gobierno sea Jaime Peñafiel, Mª Teresa Campos o por qué no, Mercedes Milà.


Marg

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