martes, 21 de octubre de 2008

La versión china de Julián Muñoz

Dos meses después de que China deslumbrara al mundo entero con lo que muchos han calificado como los Juegos Olímpicos más espectaculares de la Historia, el responsable de las obras de Pekín 2008 ha sido condenado a muerte por corrupción.

Así lo publicaban ayer los medios locales, que informaban de que Liu Zhihua, teniente de alcalde encargado de Obras Públicas, Propiedad Inmobiliaria, Tráfico y Deportes, fue sentenciado el sábado a la pena capital, aunque su condena podría haber sido suspendida por dos años a cambio de una cadena perpetua si el reo se porta bien durante ese tiempo.

Según el fallo judicial, Liu Zhihua, de 59 años, aprovechó su posición como «número dos» en el Gobierno local de Pekín para embolsarse, entre él y una de sus amantes, unos 763.000 euros entre 1999 y 2006, a base de sobornos relacionados con la construcción del parque tecnológico de Zhongguancun, donde se ubican gran parte de las empresas informáticas de la capital china.

Por este motivo, Liu Zhihua fue detenido y destituido de su cargo en junio de 2006 y expulsado del Partido Comunista seis meses después. Aunque el Gobierno central insistió entonces en que su comportamiento no había afectado a los proyectos olímpicos, lo cierto es que el caso alertó sobre la corrupción que había proliferado en torno a Pekín 2008.

Curiosamente, esta versión china de Julián Muñoz, no es el primer caso de alto cargo condenado por corrupción que mantenía a una o varias amantes. Dicen que de los 16 altos cargos estatales juzgados en los últimos años, 14 tenían queridas. El caso más sonado, aparte del actual, fue el del apodado “alcalde bragueta” por tener once amantes, ya que usó su cargo para aprovecharse de las esposas de varios empresarios.

Aunque a mi la noticia me trae a la mente la versión china de nuestro alcalde, el corrupto por excelencia, Julián Muñoz con sus líos entre su ex-mujer y su amante folclórica, es evidente que la justicia china, a diferencia de la nuestra, no se anda con chiquitas cuando alguien roba el dinero de sus arcas. Lo más sorprendente es que parte de las tretas llevadas a cabo por los muñoces de turno chinos sean para “beneficiarse”, perdón por la expresión, y luego mantener, a las mujeres de los empresarios del país.

Bastante repugnante es ver la nula importancia y el concepto que todavía se tiene de las mujeres en algunos sitios. A ver qué día podemos ver la versión china de “la dama de hierro”, porque en lo que respecta a los corruptos y a los "alcalde bragueta", sean de donde sean, tenemos para largo
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1 comentarios:

Anónimo dijo...

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